El dibujar como Giacometti nos permite poner en orden el asunto, la gran cantidad de información visual que percibimos requiere una serie de tanteos que nos permita ordenarla y ubicarla en su posición correcta, pero este ejercicio de planteamiento no es una mera labor de trasladar elemento a elemento la realidad sobre el papel sino todo lo contrario, plantear la globalidad, esto genera un espacio translúcido, casi trasparente que nos permite entender el asunto que vamos a llevar a cabo.
Sobre esta concepción general del espacio, vamos trazando relaciones tanto reales como virtuales que nos permiten poner en relación la globalidad planteada, aunque las líneas empiezan a encajar levemente es necesario en ocasiones el retroceso, es decir podemos ajustar el dibujo o podemos ajustar y desajustar a medida que todo va encajando consiguiendo que el espacio sea verdaderamente verosímil, este proceso de ajuste desajuste tambien otra forma de tanteo pero más limitada pues pretende establecer un cerco sobre la información que trasladamos al papel.
Por último, hemos introducido una novedad importante en el trabajo de esta semana que me ha resultado muy interesante, el juego de luces/sombras y reflejos, resulta ser un paso adelante en cuanto a la representación del espacio, y que ayuda crear una atmósfera abstracta que matiza esa percepción del espacio de tal forma que podemos considerar no solo la profundidad sino la dimensión y la atmósfera del entorno.
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